Antes de nada, tenemos que aclarar algo: con pinzas sexuales, no nos estamos refiriendo a pinzas para pezones y demás artículos de BDSM. Eso, para otro día. Lo que venimos a enseñaros hoy es completamente diferente.
Las pinzas sexuales son un juguete vibrador para parejas. Este consiste en un vibrador en forma de pinza de la cual se introduce una parte en la vagina y una parte se deja fuera, en la zona del clítoris. Las pinzas sexuales se encajan y se adaptan a la anatomía de cada mujer. Después, la pareja suele podeer practicar sexo con la pinza puesta.
Ambos integrantes sentirán la vibración del juguete, que suele poder personalizarse a distancia, y la mujer recibirá una triple estimulación: una por la vibración en el clítoris, otra por la estimulación del punto G, y la tercera por el placer de la penetración recibida.
Como veis, esto de las pinzas sexuales es un gran invento, porque permite que las parejas disfruten de sus ventajas y multipliquen el placer sexual juntos. En nuestros supermercados tenemos algunos modelos, y hoy vamos a hablaros de dos: el Sync de WeVibe y el Lush 2 de Lovense.
Por un lado, el WeVibe Sync es uno de los más vendidos, y tiene dos motores. Es de las pinzas sexuales más novedosas del mercado, y viene con un control remoto para regular la vibración. Sin embargo, también se puede controlar a través de la aplicación móvil. Se ajusta completamente a todo tipo de cuerpos por su elasticidad, pudiendo abrirlo o cerrarlo más según la persona.
Por otro lado, el Lush 2 de Lovense es como un huevo masturbador y, en este caso, no se puede utilizar mientras se practica la penetración. Sin embargo, igual que el WeVibe Sync se puede conectar al smartphone para que tu pareja pueda participar en tu estimulación a través de su móvil, regulando la estimulación proporcionada en la aplicación.
Sea como sea, podéis disfrutar en pareja de lo que estas pinzas sexuales pueden aportaros. El placer del sexo, ¡multiplicado por mil!