Por si aún era necesario despejar algunas dudas, os ofrecemos una nueva razón para aseguraros de que practicar sexo es bueno para la salud y para nada perjudicial. Muchas veces se nos dice que el hecho de practicar sexo aumenta el riesgo de infarto, y que las personas que han sufrido uno u otros problemas cardíacos deben reducir su actividad sexual al mínimo. Sin embargo, eso no es exactamente así.
Un estudio del Instituto de Epidemiología y Biometría Médica de la Universidad de Ulm (Alemania) sostiene que el sexo rara vez desencadena en un infarto. Este estudio califica de “improbable” que un ataque al corazón sea originado de forma determinante por el sexo. Sólo un 0,7% de la muestra estudiada había mantenido relaciones sexuales una hora antes de padecer el ataque. En cambio, el 78% de las personas encuestadas que habían sufrido un infarto no habían practicado sexo en más de 24h.
Estos datos nos demuestran que los infartos producidos durante las relaciones sexuales no vienen dadas exclusivamente por dicha actividad, sino por muchos otros factores, conocidos o no, que pueden ser una mala alimentación, problemas cardíacos congénitos o malos hábitos como el tabaco, por ejemplo.
Además, los encuestados de este estudio demostraron que en muy pocas ocasiones se recibe información detallada sobre recomendaciones en los hábitos sexuales tras sufrir un infarto. Por ello, muchas personas con estos problemas en el corazón dejan de practicar sexo por precaución o miedo a que vuelva a ocurrirles. En este caso, los médicos y cardiólogos deberían estudiar cada caso en particular y darles a los pacientes más datos sobre la vida sexual y los hábitos que deben llevar a partir de ahora, para que así todos y todas podamos disfrutar de nuestra sexualidad sin límites.
¿Qué os parece esta investigación? ¿Creéis que nuestra salud cardíaca tiene algo que ver con el sexo que practicamos?